Cuentan que una vez, dos mujeres recurrieron al arbitraje de Zeus (Júpiter) aduciendo cada una que el niño que se disputaban era su hijo. Ambas afirmaban desesperadamente que eran sus madres, siendo imposible que un niño fuera hijo de dos madres, o sea, que una decía la verdad y la otra mentía.

Zeus, apelando a su astucia y su sabiduría, al ver que era imposible discernir cual de las dos mujeres era la verdadera madre, decretó que el niño debía ser partido en dos y cada una de las mitades, entregada a cada supuesta madre.

Ante esta sentencia, una de las mujeres se abalanzó a sus pies pidiendo clemencia y renunciando a su derecho sobre el niño, con tal de que éste no fuera asesinado, y retirando su reclamo manifestó que cedía de buena voluntad al niño a la otra mujer, con tal que éste permaneciera con vida.

Allí entonces Zeus, descubrió que semejante sacrificio sólo podía corresponder al amor de la madre verdadera, la que prefería perder a su hijo que verlo muerto, y decidió entregarlo a ella diciendo: “Toma tu hijo, has demostrado con tu amor, ser la verdadera madre del niño”. De este modo, debido al amor se zanjó la diferencia y fue a través de él que se corrigió la injusticia.

El concepto de lo que es justo y lo que es injusto, desde siempre ha sido uno de los estímulos que más han afectado al ser humano, el motivo que más lo ha movilizado produciendo emociones en su interior que muchas veces no han podido ser controladas.

Si estas emociones se mantienen reprimidas durante un largo tiempo producirán un daño que puede llegar a exteriorizarse en algún síntoma físico, porque el individuo está sufriendo una gran angustia al no poder expresarse; si se exteriorizan estas emociones, también a veces puede producirse daño externo, siendo muy difícil predecir los resultados que pueden ocurrir en tales situaciones.

Pero vamos a concentrarnos mejor en el concepto de “justicia”, o sea, de algo que “es justo o no lo es”, para adicionar información sobre el mismo. Obviamente lo que consideramos justo o injusto tiene relación con lo que llamamos justicia, pero sin duda, con “nuestro concepto” de la justicia.

La imagen que representa a la justicia, o sea, el modelo original o prototipo arquetípico de la justicia puede encontrarse representado con todas sus características en el Arcano 8 del Tarot, llamado “La Justicia” cuya imagen vemos encabezando este artículo.

La Justicia, está representada por una mujer adulta sentada en una especie de sillón, de lo que se deduce que está en estado de quietud y análisis (el reposo está indicando concentración en la tarea), y los dos pilares laterales del sillón representan ambos brazos del Árbol de la Vida, que encarnan las energías de Saturno (planeta que indica responsabilidad, respeto, juicio estricto) y Júpiter, planeta que encarna la energía de Zeus, el mítico dios griego que gobernaba el Olimpo, con su legalidad y su justicia.

En su mano derecha se la ve empuñando una espada que representa el orden y el castigo si fuese necesario, pero a diferencia de la representación mundana, esta mujer no lleva los ojos tapados ya que debe observar cuidadosamente el equilibrio de la balanza de la que cuelgan ambos platillos, el que representa a Aries, el comienzo de la noche, y Libra, el comienzo del día, lógicamente ubicados en oposición sobre el horizonte.

Por encima de la figura podemos observar el símbolo astrológico del Signo de Piscis, representando al Karma, o sea, la Ley de Acción y Reacción, que indica que todo hecho tiene su inevitable consecuencia en este mundo dual.

Su vestimenta es formal y el color azul/celeste está representando la espiritualidad, así como la letra hebrea Heth o Jet nos está hablando de deseos de justicia, porque se refiere a la falta o delito, e indica que trasciende el plano de la Naturaleza.

Esta letra es la octava del alfabeto, y su número es el Ocho, representando numerológicamente al poder y la autoridad, así como la falta de elementos condicionantes y remarcando lo estricto en su decisión.

Como conclusiones podemos obtener varios conceptos claves, como por ejemplo, que lo justo no pertenece a este plano, ya que lo trasciende.

También la presencia de Aries simboliza al YO, o sea, “mis intereses personales”, contrapuesto al significado de Libra que encarna la presencia de la otra parte, del opuesto a mí, o sea, “los intereses de EL OTRO”.

El único Signo del Zodíaco que es capaz de situarse alternativamente en ambos extremos, es Libra, considerado como buscador eterno del equilibrio, la justicia y el amor; por eso es que la indecisión es característica de los libranos, porque muchas veces no logran definirse en su búsqueda del punto medio ya que son capaces de ver ambas caras de la cuestión y comprenden los motivos de ambos extremos.

Es decir, que los conceptos de “justo o injusto” siempre se refieren a la comparación entre dos extremos de una misma situación, ubicados en los dos platillos de la balanza. Se evidencian entonces, dos puntos de vista, el mío personal (Aries) y el del otro opuesto a mí (Libra), los que deberían estar en equilibrio y complementarse, pero si existe algún reclamo irreconciliable, se evidencia que no lo están.

Cuando en una tirada de Tarot, esta carta aparece derecha, simplemente decimos (aún habiendo muchos otros significados complementarios) que la situación es justa, que lo que hay es lo que tiene que ser, que cuenta con la aprobación de lo Supremo y que corresponde al Plan de Vida o Proyecto Natal de la persona.

Cuando aparece invertida, entonces estamos ante la presencia de una injusticia, y en este concepto debemos insistir. Se interpreta como que la situación no es justa, no es correcta, pero como la tirada se hace a una persona determinada, entonces se considera como que ella está involucrada en algo injusto, ya sea porque lo presencia y lo sufre, o porque lo genera con su actitud equivocada.

Muchas veces, esto sorprende al consultante, quien sostendrá firmemente que es víctima de una injusticia y que es ajeno a ella, es decir, que son los demás quienes son injustos con él. No contempla la posibilidad de que pueda ser él con sus actitudes quien se está apartando del equilibrio, dificultando los mecanismos naturales y que esto trae como contrapartida la reacción del medio contra él.

Esto nos dice que el concepto “justo/injusto”, si bien involucra siempre a ambas partes que intervienen en la situación de conflicto, es un criterio subjetivo, es decir, sostenido como creencia en función de la defensa personal de los intereses propios de cada interesado.

Puede ser, entonces, que la persona que afirma ser víctima de una injusticia, según él lo ve, puede estar precisamente siendo el que se aferra a una situación injusta o quien la genera con su actitud.

La presencia de este Arcano invertido representa una advertencia en el sentido que no se están haciendo las cosas en la forma correcta y que ello derivará tarde o temprano, en una consecuencia adversa y desagradable, para una de las partes, o bien, para ambas.

Entonces, ¿Qué es justo y qué no lo es? No es sencillo lograr el equilibrio objetivo dado que siempre existen dos partes enfrentadas que no pueden reconciliarse, y a su vez, cada parte estará firmemente convencida que tiene la razón. Lo que una parte considera como justo, la otra seguramente lo sentirá como injusto, ya que de otra forma estarían de acuerdo y no se presentaría ninguna clase de enfrentamiento ni discusión.

Esto nos conduce a una reflexión: tal vez estamos haciendo algo incorrectamente o bien estamos considerando la posición de un solo platillo, sin que tengamos conciencia de la otra parte y de sus intereses, es decir, que estemos siendo carentes de empatía y concentrándonos únicamente en nuestros beneficios, lo que representa una parcialidad y por lo tanto, una actitud subjetiva.

Lograr justicia significa hallar un punto de equilibrio exacto entre ambos extremos, sin duda, pero por otra parte recurrimos a ella siempre en la búsqueda de la defensa de nuestros intereses personales, según lo percibimos.

Puede que estemos esgrimiendo nuestra verdad, pero que no necesariamente coincida con la verdad. Puede que estemos siendo sinceros en ello, en nuestra creencia subjetiva de nuestro derecho, pero la otra parte se opondrá manifestando a su vez que defiende su verdad y sus derechos, que por supuesto, también son subjetivos.

Hasta inclusive ambas partes enfrentadas, siendo sinceras y honestas, es posible que estén alejadas del justo punto medio debido a la estrechez o la falta de movilidad de sus puntos de vista. Por otro lado, ninguna de las partes puede avizorar con claridad las consecuencias futuras que ocurrirán una vez tomada una decisión, situaciones que pueden favorecer a una de las partes contendientes, a las dos, o inclusive a ninguna.

Por tal razón, existe un viejo dicho popular que reza: “Más vale un mal arreglo que un buen juicio”. Y la sabiduría popular está sostenida por las vivencias y la experiencia de siglos, lo que en cierta forma avala su certeza.

Entonces… ¿Qué es justo y qué no lo es? Esta apreciación nunca ha de ser imparcial según el punto de vista de cada interesado, y por lo tanto, generalmente carecerá de equilibrio y de evaluación cierta. Para ser apropiada, debería ser objetiva, y en cambio siempre será subjetiva.

En estas circunstancias es cuando por lo general dejamos de lado a un componente que terminaría con el conflicto, y este ingrediente secreto es ni nada más ni nada menos, que el amor, el que intervino en la decisón acertada de Zeus.

La equidad, el respeto, el equilibrio, son todos componentes del amor que dejamos de lado subjetivamente cuando intentamos racionalmente discernir según nuestros propios intereses, entre qué es justo y qué no lo es.

El Sendero Del Ser. Bendiciones. Leo

Suscribiéndote al blog (sólo nombre y casilla de mail) recibirás de inmediato cada artículo que se postee en el mismo y así podrás decidir si te interesa y al clickear en el mismo te llevará directamente al blog para leerlo.

Si te ha resultado atractivo este artículo puedes compartirlo libremente en tus redes sociales citando la fuente de origen, o bien, compartir el enlace al blog: www.elsenderodelser.com a tus amigos y a quienes puedan interesarles los temas tratados.

www.elsenderodelser.com – www.profesorleo.com.ar – profesorleonqn@gmail.com