Lo que escribí a continuación no resultará digerible para todos sino sólo para aquellos que han desarrollado la capacidad de darle una oportunidad a aquello que desafía sus creencias y puedan admitirlo como conocimiento posible sin obligación de participar de la opinión citada. Si no se toma este artículo con mentalidad abierta y desestructurada, su contenido puede ser muy perturbador y shockeante, por lo que en tal caso no recomiendo su lectura.

Hay distintas clases de Humanos: humanos reales y humanos koboltizados; koboltizar es el proceso por una entidad no humana de tomar una materia y hacerla su propio cuerpo, es decir, poseerla, habitarla. Dentro de la especie existen Humanos reales, Humanos habitados por Elementales, Humanos hibridados con ET, Humanos con alma, Humanos que no tienen alma, Humanos habitados por Reptilianos de este planeta, otros Humanos habitados por Seres de Luz y también Humanos habitados por Arcontes o por sus secuaces, o sea, por seres de las Tinieblas.

Pero, ser un Humano completo por naturaleza, creado como Humano con todos los potenciales de nuestros Creadores, con algunos de esos factores despiertos y otros aún dormidos, es más fantástico aún que ser un Dios sobre la tierra. Los Humanos tenemos cierta fragilidad en nuestro cuerpo material por habitar estas 3D y nuestro ADN ha sido manipulado a fin de que no vivamos más tiempo que nuestros captores, dado que en realidad estamos viviendo en cautiverio, pero aún así tenemos una envidiable facultad imposible de alterar, de ser criaturas espirituales inmortales porque el alma permanece invariable por siempre y por tal razón es envidiada y codiciada por tantos otros seres que no tienen alma y por tanto su mayor deseo es capturarla.

Esta inmortalidad ha sido buscada desde siempre y es prácticamente una realidad en algunas Especies muy particulares, o que al menos cuentan con una longevidad de decenas de miles de años. Algunos “dioses” ET han colonizado este planeta atraídos por la presencia en él de metales preciosos, entre ellos el oro, que convenientemente tratado y transmutado mediante alquimia en oro monoatómico en lugar de molecular, puede brindar una extensa longevidad a quienes lo consumen como alimento.

Esto explicaría la actual situación financiera en la cual ciertos gobiernos mundiales han abandonado el “patrón oro”, material precioso que prácticamente ha ido desapareciendo del planeta; son pocos los países que aún tienen reservas en oro, por ejemplo ha trascendido que Fort Knox (EEUU) está vacío porque el oro allí guardado se ha utilizado con otros fines de intercambio por tecnología espacial ET.

La abundante y permanente presencia de ET en el planeta se ha debido a la intención de servirse de la especie humana, ya sea como mano de obra para obtener minerales, como sustento energético debido a la energía emocional que emitimos cuando nos descontrolamos o sufrimos de cualquier modo, o bien como alimento material a través de nuestro cuerpo físico, sangre y hormonas humanas, las que ellos emplean tanto para experimentación como para alimento tal como hace el Hombre con pollos, pescados, vacas y otros animales, sin que eso al ser humano le perturbe la conciencia.

Tampoco a estos seres les preocupa el alimentarse con seres humanos ya que no disponen de conciencia en ese sentido, pero claro, a nosotros eso nos parece una atrocidad dado que somos humanos siendo que no nos parece ninguna atrocidad matar animales para comerlos.

Esta situación permanece vigente y explica las constantes abducciones por parte de estas “superiores” especies repugnantes, así como la generalizada desaparición de miles de seres humanos que nunca tendrá respuesta porque los gobiernos oscuros se encargarán de ocultar a fin de cubrir las tropelías que son realizadas contra el ser humano.

Otros ET, como los Arcontes por ejemplo, necesitan de los humanos para servirse como alimento de sus emociones negativas. El miedo, el dolor, el sufrimiento, la angustia que experimentan las personas emiten una frecuencia muy elevada y sutil que es absorbida por estos demonios y constituye para ellos un manjar del que se alimentan y regodean, por lo que su “trabajo” consiste en generar permanentes situaciones de conflicto, guerras, alteraciones y catástrofes “naturales”, así como la perversión inducida en las personas inclinándolos hacia los desenfrenos a través del sexo, la droga, la maldad, los asesinatos y la corrupción.

Asimismo ellos provocan conflictos bélicos y “se pasean” con sus naves sobre los campos de batalla y las regiones devastadas por la guerra y los terremotos, absorbiendo el licor precioso que significa para ellos las emisiones energéticas de dolor y sufrimiento de los seres humanos. Esto se ha comprobado por muchos combatientes al ver en el cielo naves ET que los sobrevuelan.

Todo lo que desde siempre se ha considerado como negativo y antinatural, que sea contrario a la virtud, consiste en su deseado alimento, sobre todo el miedo y el sufrimiento. De allí que sea éste un planeta malsano y enfermo dado que siempre se ha estimulado que de algún modo el ser humano sufra y a su vez, haga sufrir a otros.

El arma que se ha utilizado desde la presencia de humanos primitivos sobre esta tierra, ha sido las inducciones mencionadas y el elemento de dominio masivo y sumisión ha sido gestionado principalmente por el establecimiento de las religiones, creadas aprovechando la credulidad natural del ser humano que menosprecia aquello que ve, pero teme y adora a lo que no ve y sobre todo cuando le representa un misterio.

La calidad del misterio es proporcional al grado de ignorancia de la persona; por ejemplo, un jíbaro del Amazonas podría sentir la necesidad de adorar a un simple elemento como un teléfono celular, creyendo que a través de él puede comunicarse “con los dioses”, ya que no le encontrará explicación al misterioso aparato por falta de educación previa.

Ya ha sucedido esto con la misteriosa “Arca de la Alianza” por medio de la cual los sacerdotes híbridos se comunicaban con la nave de Jehová. Lo mismo sucede con la religión; el temor a Dios es más que suficiente para que muchas personas ni siquiera se animen a investigar los orígenes y las bases de las religiones. Muchas veces ese temor es disfrazado como fe.

Sería más natural que amáramos a nuestro Padre Creador, que no es Dios, en lugar de temerle, pero sin embargo hay religiones que sólo admiten como participantes a los “hombres temerosos de Dios”, aprovechándose de su ignorancia, su primitivismo y su ceguera.

Paralelamente, en nombre de la religión se han producido desde siempre tanto esclavitud, asesinatos, hechos repugnantes como violaciones, pedofilia, y aún hoy siguen siendo costumbres deleznables de sacerdotes que “inexplicablemente” permanecen sin ser condenados por las hipócritas cúpulas religiosas.

Los sacrificios humanos por motivos religiosos han sido moneda común en nuestra historia como Humanos. En la misma Biblia, se cuenta que el dios Jehová auspicia el holocausto, o sea, la muerte por el fuego de animales necesariamente vivos para así alimentarse de su sufrimiento en nombre de lo que él llama sencillamente “olor conducente al descanso”.

Suena irracional y psicopático pero sin embargo a pocas personas creyentes les suena como una actitud bestial y demoníaca; lo toman naturalmente sin reaccionar porque ése es el milagro de la fe. El milagro de que el creyente no se cuestione nada y aunque no sea él mismo capaz de cometer esas atrocidades, baje la cabeza en señal de aprobación.

El sufrimiento, entonces, es el alimento principal de estos seres enfermos habitantes de la Cuarta Dimensión y por tal causa, “magos negros” capaces de realizar “milagros” que maravillan a la mayor parte de los seres humanos, como pobres ingenuos que ven solamente en blanco y negro, y nada más que hasta la punta de su nariz porque las personas tenemos un espectro sensorial sumamente limitado.

Las guerras religiosas han sido favorecidas y auspiciadas con ese fin, dividir y causar dolor, muerte y sufrimiento. De allí la importancia de comprender que en la medida que aprendamos a permanecer en equilibrio frente a estas situaciones, sin dejarnos llevar por el miedo, la angustia, el sufrimiento, es decir, aprendiendo a transmutar la energía de nuestras emociones, seremos cada vez más impermeables a los efectos de estos “dioses” parásitos, malsanos y enfermos.

Jesucristo vino a esta tierra a enseñar la verdad sobre estos principios y a desenmascarar a estos mercaderes del sufrimiento, pero lógicamente fue combatido por todos los intereses terrenos en la medida que su Doctrina se iba difundiendo y volviéndose peligrosa para los intereses del nefasto rey de este mundo.

Sin embargo hay también grupos de ET “positivos”, es decir, que se han compadecido del pobre destino del ser humano y ellos han sido quienes han hibridado a Jesús impregnando a distancia el vientre de María, su madre material. Por eso María fue madre virgen, y por tal causa Jesús fue constantemente protegido y advertido por “Ángeles”.

Quien lea detenidamente y sin prejuicios la Biblia, observará que en sus relatos constan cuatro personajes de peso: Jesús (en el Nuevo Testamento), su Padre a quien Él mencionaba constantemente, y además Dios, y el Demonio. En un plano de dualidad, sólo dos antagónicos pueden coexistir; por eso Jesús mencionaba que “estás conmigo o estás en mi contra”. No hay lugar para cuatro poderes distintos: Jesús y su Padre representan la parte Luminosa, Dios y el Diablo (dos patéticas versiones del mismo excremento) por el lado Oscuro.

Cuando alguien le preguntaba a Jesús si era hijo de Dios, Él le respondía enigmáticamente: “Yo no lo dije, tú lo dijiste”, haciendo siempre mención a “su Padre” y nunca, ni una sola vez, a Dios. No podía en ese entonces manifestar que Dios y el Demonio son el mismo personaje sin arriesgarse a ser quemado en una hoguera.

Su Padre es también “nuestro Padre” para los seres humanos, formando parte de la Faz Luminosa mientras que Dios, Jehová, YAVE, o como prefiera autodenominarse esta lastimosa tribu de perdedores es simplemente un farsante cuyo verdadera esencia es demoníaca y oscura en lugar de ser luminosa.

Este despreciable personaje es el rey de este infierno de materia física sobre la Tierra, apoyado por sus secuaces demoníacos; de otro modo, la Tierra sería un verdadero paraíso y cada día puede observarse que está más lejos de serlo. Si este ser nefasto no fuese el rey de este mundo inmundo no podría haberle ofrecido a Jesús en el desierto: “Todo esto será tuyo si aceptas venir conmigo”, a lo que Jesús contestara “No es esto lo que he venido a buscar”.

Por otro lado, Jesús llamaba “muertos” a los seres sin alma; por esa causa le dijo al escriba que se le acercó pidiéndole tiempo para enterrar a su padre recien muerto: “Deja que los muertos entierren a sus muertos, y sígueme”. Todo absolutamente tiene su explicación coherente, lo que hace que la mentira armada se caiga a pedazos.

“¿Sabes que pronto todos van a saber tus secretos?” es uno de los artículos que escribí no hace mucho.

Presiento que estas palabras, habrán de sacudir y sorprender a los no advertidos, palabras de las cuales me hago absolutamente responsable luego de haber investigado una vida entera en la búsqueda de la verdad sobre “Dios” y los ET que realizan abducciones, llegando a la conclusión por infinitas e inapelables pruebas de que se trata de lo mismo: escoria cósmica, oscura, demoníaca… y descartable, cuando llegue su momento.

Se están produciendo hoy fenómenos “inexplicables” en los cielos, sólo perceptibles para aquel que no viva encerrado en su placard, que nos hablan de conflictos y luchas entre razas ET; los que controlan el planeta no están dispuestos a cederlo porque de este perverso sistema de explotación se alimentan. Hay que distinguir de los efectos producidos en las nubes por el holográfico Blue Beam norteamericano que busca confundir con imágenes religiosas.

Este asqueroso “sistema” no sólo está compuesto por ET sino que del mismo forman parte la inmensa mayoría de los gobernantes y poderosos que lo sostienen, en detrimento de la Humanidad; se trata de una conspiración más antigua que la presencia humana en este planeta. Desde siempre ha consistido en intercambiar poder y conocimiento ET por vidas humanas.

De allí la enorme dicha de ser un verdadero humano, inmortal, luminoso, aunque muchos de los ejemplares de la especie se han inclinado abiertamente por la Oscuridad corrompidos por el dinero y el poder, elementos ficticios que les han sido otorgados como precio de compra pero a su vez, imposibles de retener.

Por lo general, ninguno de estos “humanos” entregados a cambio de fama, dinero, fortuna y poder, llega a superar la edad de los 60 años siendo que muchos de estos famosos que han entregado su alma al Diablo son reclamados a partir de los 40 años, basta con comprobarlo a través de la extensa información que se encuentra en Internet.

Pero que el ser humano aún sea un niño frente a los millones de años de desequilibrada evolución de otras especies inteligentes, no significa que sea insignificante a los ojos del Universo y de las innumerables razas favorables a nuestra esencia humana.

Hechos aparentemente inexplicables están por suceder y aún en el presente están sucediendo, pero son ocultados fácilmente ante una Humanidad distraída por los acontecimientos cotidianos y cada día más sumergida en la pobreza y la oscuridad a fin de que no tenga tiempo de pensar y discernir, y de ese modo, tomar recaudos y defenderse.

Ni siquiera sospecha la inmensa mayoría de las personas que el verdadero “premio” de esta lucha infernal en la que intentamos sobrevivir, somos nosotros mismos. Se nos ha hecho creer que somos insignificantes siendo que en realidad somos reyes; esto se ha debido a miles de años de manipulación de aquellos que sobreviven a costa del sufrimiento humano.

Hay mucha tela para cortar en este sentido y no es mi intención hacerlo ahora; cada quien que se sienta libre de tomar en cuenta estas advertencias o de negarlas y seguir con los ojos cerrados. Si hay algo que he logrado superar es la debilidad de sentirme afectado por las opiniones ajenas y por el miedo; no he llegado a esta edad para seguir preso de prejuicios, por lo que me tienen sin cuidado las reacciones que mi pensamiento desate.

Ya he manifestado muy claramente mi posición: como expresara una Entidad pacífica de otra Dimensión hace muchos años, “La Luz trae respuestas, la Oscuridad las oculta”, sencilla “receta” para lograr distinguir lo cierto de lo errado, lo luminoso de lo oscuro. Pero tal vez después haya quien luego de advertirse encuentre respuestas que justifiquen lo que he mencionado y tome prevención, investigue, discierna, y encuentre la verdadera razón de que se nos haya postergado y engañado durante siglos, y de ese modo pueda llegar a sentir en verdad lo que orgullosamente significa la especial dicha de ser humano.

El Sendero Del Ser. Bendiciones. Leo

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